QUIET BLUE, from trumpeter and oenologist Thibault Renard, is an acoustic Jazz album – organic, born of air, wood, and time, just like a fine vintage wine.
QUIET BLUE (out 10 october 2025) reveals itself as a profoundly nuanced, delicate, and spontaneous jazz work, recorded in a single day. Its compositions seem to have matured with the patient slowness of nature taking its time, yet they surprise with their sudden appearance, like a flower blooming without warning. This album by Thibault Renard is imbued with the very sap of a human life, that of an artist striving to stand firm against the adverse winds.
The very existence of this opus is inseparable from the contributions of David Sauzay (soprano and tenor saxophones), Daniel Gassin (piano), Mauro Gargano (bass), and Andrea Michelutti (drums). Their art of improvisation, immediate listening, and remarkable sensitivity have breathed palpable life into each track.
https://www.juste-une-trace.com/en/news/quiet-blue-by-thibault-renard/
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QUIET BLUE, del trompetista y enólogo Thibault Renard, es un álbum de jazz acústico: orgánico, nacido del aire, la madera y el tiempo, como un buen vino de añada.
QUIET BLUE (a la venta el 10 de octubre de 2025) se revela como una obra de jazz profundamente matizada, delicada y espontánea, grabada en un solo día. Sus composiciones parecen haber madurado con la paciente lentitud de la naturaleza, pero sorprenden con su repentina aparición, como una flor que florece sin previo aviso. Este álbum de Thibault Renard está impregnado de la esencia misma de la vida humana, la de un artista que lucha por mantenerse firme ante la adversidad.
La existencia misma de esta obra es inseparable de las contribuciones de David Sauzay (saxofones soprano y tenor), Daniel Gassin (piano), Mauro Gargano (bajo) y Andrea Michelutti (batería). Su arte de la improvisación, su escucha atenta y su notable sensibilidad han insuflado vida palpable a cada tema.
https://www.juste-une-trace.com/en/news/quiet-blue-by-thibault-renard/
1 Shifting tones 04:18
2 Blue hills 05:32
3 Scratch that 03:37
4 Quiet blue 05:51
5 Knuckle samba 05:05
6 Time vagabond 05:36
7 Body and truth 06:03
8 Antique blues 04:24
9 Sweet rise 05:35
10 Shifting tones (reprise) 05:44
Credits:
Thibault Renard (trumpet)
David Sauzay (tenor & soprano sax)
Daniel Gassin (piano)
Mauro Gargano (bass)
Andrea Michelutti (drums)
Label: Juste Une Trace
Genre: Jazz
Subgenre: Contemporary Jazz
Total Runtime 51:45
2025


Voy a aprovechar este post para hablar de Thibault Renard, Red Prysock y David Liebman a la vez.
ReplyDelete- Thibault es el “enólogo del jazz” tal y como él se presenta. El problema radica en que la cosecha de sus caldos se encuentra anclada a mediados de los años 60 del pasado siglo. Louis Hayes, por ejemplo, ha insistido una y otra vez en esa misma fórmula. Pero Hayes es que es de esa época. Lo de Thibault es una síntesis entre revival y kitsch.
- Red Prysock tiene la ambición de recrear algún hit a la manera en que Lou Bega hizo con “Mambo Nr. 5” de Pérez Prado. Así que más o menos participa del mismo cliché de Thibault con la diferencia del punto de anclaje. El suyo se encuentra en las big bands (concretamente en la de Charlie Barnet). Otro revuelto de revival y kitsch.
- David Liebman es el músico con mayor talento de los tres, pero también tiene su propio punto de anclaje. A diferencia de los anteriores, que son gatos callejeros, Liebman cuenta con una fortuna familiar que le ha abrierto muchas puertas. Su mayor problema es que cuando él llegó a la escena, la mayoría de las figuras que andaban en el jazz estaban en el ocaso. Aparece en un Lp recopilatorio de Miles Davis (que odiaba tocar junto a músicos blancos) llamado “Get Up in It”. La historia es más o menos ésta. La discográfica Columbia mete a Davis en el proyecto de tocar en conciertos con gente venida del conservatorio que ponga plata sobre la mesa. Son entrenamientos. De ahí salen también Agharta (1975), Pangaea (1976) y Dark Magus (1977). En este último Lp también aparece Liebman. Así que puede decir que tocó con Davis, pero Davis en realidad no tocó junto a él. Davis jamás reconoció ninguno de tales Lps como trabajos suyos. Son cosas que le tocaba hacer debido al contrato de la Columbia, que no dejaba de ser la mejor compañía de grabación desde los años 50.
Pero este tipo de “colaboraciones” hicieron que el ego de Liebman escalara, a pesar de que tocó al lado de mucha gente… pagando. Y como la fijación de Liebman es John Coltrane, es adepto de los saxos soprano y tenor (¡sorpresa!) y se comporta sobre los escenarios como lo hacía Trane. En este caso el punto de anclaje son los años 60 de Coltrane. Más revival y kitsch.
El mundillo del jazz a veces es un tanto patético. Por él se mueven músicos que tratan desesperados de convertirse en primeras figuras mientras persiguen ser otros o ansían pertenecer a otra época.